Todas las recetas son las originales enviadas por las personas que las conocen.
Preparación:
Formaremos con harina, agua y un poco de levadura, una pasta muy fluida; y la dejaremos fermentar una hora.
Una vez fermentada, tomaremos pequeñas porciones esféricas (como una cucharada sopera o poco más), que pondremos en la palma de la mano mojada para que no se pegue y agujerearemos con el pulgar, e iremos friendo en abundante aceite muy caliente.
Las giraremos para dorarlas por las dos caras, pues flotan.
Deben comerse azucarados y acabados de sacar del fuego.
Si se prefiere, existen en el comercio cucharones molde con los que se puede dar forma a los buñuelos sin usar las manos.