La carne
Estofat de bou, estofado de buey

Ingredientes:
  • - 1 kilo de buey para guisar (por supuesto, tambien vale hacerlo con ternera).
  • - 5 patatas medianas.
  • - 2 tomates medianos maduros.
  • - 2 cebollas medianas.
  • - 1 vasito de vino oloroso o una copa de brandy.
  • - 3 dientes de ajo.
  • - 2 hojas de laurel.
  • - perejil.
  • - sal
  • - aceite de oliva.
  • - 1/2 litro de caldo de carne (si no tenemos, agua).
Preparación:
  1. Cortamos los ajos a tiras y las cebollas las picamos.
  2. Ponemos una cazuela de barro adecuada a fuego lento con un buen chorro de aceite de oliva, y sofreimos los ajos y la cebolla hasta dorarlos.
  3. Picamos mientras el tomate y cortamos la carne a dados medianos, y cuando esté el sofrito, lo incorporamos todo y removemos lentamente añadiendo el perejill picado fino y las 2 hojas de laurel, trabajándolo todo hasta que la carne esté bien sofrita (estofada).
  4. Cuando esté listo, cubriremos con el caldo, y lo dejaremos cocer a fuego lento durante una hora, tapando antes la cazuela.
  5. A continuación lo rectificaremos de sal y añadiremos las patatas cortadas a tacos medianos, el vino o brandy, removeremos todo y lo dejaremos de nuevo cocer a fuego lento hasta que estén tiernas las patatas (35 a 45 minutos según variedad y tamaño de los tacos).
  6. Un buen aderezo para este plato se hace picando un poquito de sal, un diente de ajo, perejil, un puñadito de almendras y el zumo de medio limón.
  7. Buen provecho.
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El mercado de la "escuraeta"

Este mercado cuya antigüedad se remonta a los tiempos de cristianización de la ciudad (siglos XIIII-XIV) era el lugar donde los aprendices del oficio de alfareros exponían sus cacharros para demostrar su habilidad y destreza y así ser admitidos en el Gremio alfarero.

Es un mercado cuyo principal producto de venta es material de loza, cerámica y barro cocido para el hogar.

Desde los pueblos de los alrededores de la ciudad venían al mercado a la compra de este tipo de artículos.

Uno de los productos más tradicionales es la conocida como Campanita de la Virgen, consistente en una pequeña campana de barro cocido, con el yugo pintado de rojo.

A los pies del Miguelete y a la entrada de la Catedral, es el lugar privilegiado para visitar este pequeño mercado y disfrutar del entorno en cualquiera de sus múltiples establecimientos hosteleros.

...y siempre hay algún gracioso que, aunque esté cerrado, le gusta provocar una sonrisa en los paseantes.