Es un adobo complejo para esparcir sobre toda la superficie de las carnes rojas unos momentos antes de asarlas o con la cantidad adecuada emplearlo como verdadero adobo dejando las carnes cubiertas de él marinando desde la víspera.
Simplemente pique a mano, o en licuadora o procesadora todos los ingredientes unas hora de anticipación y bata antes de usar este adobo. Solo debe hacerse el necesario para el uso, pues si se guarda se descompensa al prevalecer unos ingredientes más que otros y variar e forma desagradable su sabor. Lo correcto es descartar las sobras.